Una tarde normal durante la primavera del 2018, vas al supermercado y realizas tu lista de compras, carro lleno y despensa completa, todo esto para llegar a pagar y al otro lado de la caja, el empaquetador pregunta ¿Trajo su bolsa? Seguramente para esos años la respuesta era “no, otra vez”, y de esta forma debías hacer crecer <aún más> tu incontable colección de bolsas reutilizables. Así se introducía en Chile la recién promulgada Ley de 21.100 que prohibía la distribución de bolsas plásticas de un solo uso, una medida que respondía a la necesidad mundial de reducir los residuos plásticos en el medioambiente, y que posicionaría a Chile entre la creciente lista de países latinoamericanos que comenzaban a prohibir el plástico.
Antigua & Barbuda dio el puntapié inicial para esta iniciativa, al ser el primer país latinoamericano en implementar medidas para el control de la distribución de bolsas plásticas el año 2016. Esta medida buscaba dar solución a la alta contaminación del mar caribe, donde según datos de la ONU, el 70% de los residuos contaminantes marítimos correspondía a plástico proveniente de actividades terrestres.
Martín Thiel, académico de la Universidad Católica del Norte (UCN), afirma que uno de los problemas de la contaminación marítima en Chile, es que no contamos con un sistema de muestreo sistemático sobre la cantidad de plástico existente en los mares, para lo cual el año 2018 académicos de la Facultad de Ciencias del Mar de la UCN capacitaron a funcionarios de la armada de todo el país, para establecer un sistema de monitoreo estandarizado para controlar la basura marina.
Consecuencias del uso desmedido de plásticos.
Un empaque de plástico puede tardar hasta 150 años en degradarse, proceso que se ve aún más retrasado en un ambiente oceánico. Según datos de la ONU, para el año 2050 habrá más plástico que peces en los océanos si no implementamos medidas urgentes para frenar este fenómeno.
Las consecuencias de esta situación son nefastas para el medioambiente y la biodiversidad, pues se estima que el 99% de las aves marítimas ha ingerido algún tipo de plástico, y según datos de GreenPeace, actualmente más de 700 especies marinas se ven afectadas por la contaminación, lo que significa que cada año mueren más de 1 millón de aves y más de 100.000 mamíferos marinos a causa de la basura en los mares.
Medidas inteligentes y fáciles para ayudar al medioambiente.
El control de los residuos y la basura generada no debe depender sólo de políticas gubernamentales, sino que debe implantarse como un deber para las generaciones actuales y un compromiso con las futuras, para lo cual es imperante que comencemos a implementar medidas individuales y domésticas que ayuden a frenar la generación de residuos.
El reciclaje y compostaje de los residuos son sólo algunas de las medidas de sostenibilidad que ayudan a disminuir la producción de basura domiciliaria, pues también existen iniciativas que buscan aprovechar el máximo de los alimentos con un doble objetivo: frenar el desperdicio de alimentos y contribuir a la seguridad alimentaria. Para ello, se propone utilizar las frutas y verduras en su máximo rendimiento, proveyendo nuevos ingredientes para la cocina tales como tallos de brócoli rallado, cáscara de plátano y hojas de rabanito o betarraga, las cuales anteriormente eran considerados basura y hoy pueden transformarse en una ensalada gourmet.
En FrutaDirecta.cl tenemos un compromiso con el medio ambiente, por lo que en nuestras operaciones evitamos y reducimos la generación de residuos, racionalizando el uso de los recursos naturales y energéticos. Además, enfocamos nuestros esfuerzos en hacer todos nuestros empaques totalmente biodegradables, apoyando de forma directa la iniciativa de la Ley 21.100 #ChaoBolsasPlásticas, promoviendo siempre la reutilización y el reciclaje.
Comprometiéndonos con el medio ambiente y nuestra salud.
La FAO/OMS el año 2010 define a las dietas sostenibles como “Aquellas que generan un impacto ambiental reducido y que contribuyen a la seguridad alimentaria y nutricional y a que las generaciones actuales y futuras lleven una vida saludable […]”. Lo interesante de esta definición, es que incluye y da igual importancia a los conceptos de vida saludable e impacto ambiental.
La conexión entre salud y medio ambiente no es difícil de establecer: los alimentos menos procesados tienden a ser más saludables, tener una menor huella de carbono y a generar menor cantidad de residuos. Esto ya que la base de nuestra alimentación según las Guías Alimentarias del Ministerio de Salud de Chile (MINSAL) debería ser el consumo diario de agua, frutas y verduras, cereales integrales y legumbres. Todos ellos tienen en común el ser mínimamente procesados, por ende, implican un menor gasto de recursos medioambientales en su producción y una menor generación de residuos.
Las dietas con mayor contenido de verduras y vegetales, como las vegetarianas, veganas y basadas en plantas son ricas en vitaminas y minerales y contienen naturalmente un menor porcentaje de grasas saturadas, por lo que se asocian a una mejor salud cardiovascular y a un menor riesgo de muerte por todas las causas, según un estudio realizado el año 2014 por la Universidad de Pamplona, España.
Desde FrutaDirecta.cl estamos doblemente comprometidos con el medio ambiente y con tu salud, promoviendo prácticas medioambientales responsables y estilos de vida saludable, llevándote alimentos naturales, de calidad, ricos y surtidos a la puerta de tu casa. Además, estamos abiertos a cualquier sugerencia para hacer nuestras operaciones más amigables con el medioambiente ¡Te invitamos a ser parte del cambio junto a nosotros!
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Tu equipo de #FrutaDirecta